En mayo de 2022, vecinos de Algarrobo hicieron un descubrimiento inusual en la costa: una residente, Jana Toscheva, tropezó con una roca donde se veía algo parecido a vértebras articuladas. Finalmente, no era un animal, sino los restos de un elasmosaurio: un reptil marino que habitó la Tierra en el periodo Cretácico (entre 145 y 66 millones de años atrás), que podía medir hasta 14 metros de largo y pesar dos toneladas. Tenían cabezas pequeñas, cuellos muy alargados y cuatro aletas. Se estima que este ejemplar en específico vivió en la zona hace 70 millones de años y que pudo haber alcanzado más de siete metros de largo. Luego de un primer rescate a fines de 2023, paleontólogos de la U. de Chile organizaron una segunda expedición para excavar el resto de los fósiles, que se encuentran dentro de las rocas del borde costero, lo que ha dificultado su extracción y limpieza. En base al material que ya han analizado, los científicos a cargo estiman que este es el fósil de elasmosaurio más completo que se ha encontrado en la zona y que existe la posibilidad de que sea una especie nueva, ya que se distingue claramente de los fósiles de este tipo encontrados anteriormente.
Fotos: Felipe PoGa
